
Imagen cedida por cortesía de LU-VE GROUP
El espejo en el ascensor fue un extra del que no todos los edificios podían disfrutar. Con el tiempo se acabó generalizando, entre otras cosas, porque los pasajeros con tendencias vandálicas se entretenían mirándose al espejo y no dañaban así la cabina.
Hoy estamos a las puertas de que el espejo del ascensor dé un salto cualitativo y se convierta en algo más que un reflejo donde mirarse. El espejo mágico que incluyeron los hermanos Grimm en el cuento de Blancanieves parece que se ha hecho realidad y una versión muy mejorada se va a meter en las cabinas de nuestros ascensores.
En la feria de Interlift ’17 pudimos conocer de manera directa alguna de las primeras soluciones que han salido o que saldrán al mercado en el futuro próximo. Empresas de primera fila relacionadas con las telecomunicaciones, u otras que ya aplican soluciones en otros sectores, mostraron pantallas multimedias de varios tamaños con interesantes funcionalidades.
Una de las funcionalidades de la pantalla es precisamente convertirse en espejo. Los avances tecnológicos no pueden privarnos de contemplarnos a nosotros mismos para arreglarnos, regocijarnos o a veces abatirnos. En cualquier caso, con la pantalla multimedia el espejo pasa a ser una opción que podemos activar o desactivar. Además de manera fácil podemos decidir el área que queremos que ocupe, la mitad de pared de cabina, tres cuartos o pared completa.
Gracias a esta pantalla también podemos convertir una de las paredes de la cabina en escaparates en los que insertar cualquier tipo de información e incluso publicidad, algo que ya algunas empresas están explotando con éxito. Podemos crear así una vía de ingresos a tener en cuenta para los edificios de oficinas, hoteles, centros comerciales o incluso edificios residenciales. El viaje de un ascensor, aunque breve, es suficiente para que los creativos de agencias de publicidad puedan diseñar anuncios específicos para este medio.
Al ser la pantalla multimedia un auténtico ordenador, mediante la tecnología táctil la cabina incorporaría una gran tableta electrónica, que permitiría la comunicación vía web entre el pasajero y el mundo exterior. Estos son usos que habrá que observar muy de cerca para ver cómo afectan al propio tráfico del ascensor, ya que llegarían a ralentizarlo. El bloqueo de la interacción o el mismo apagado de la pantalla cuando el ascensor se encuentre a nivel de planta y abra puertas sería una manera de evitar este problema.
La pantalla también activaría automáticamente la comunicación con el exterior en ciertas situaciones. Por ejemplo, en caso de atrapamiento la pantalla podría entrar en modo emergencia y mediante la inclusión de una pequeña cámara web establecer una comunicación visual entre el servicio de asistencia técnica y la persona encerrada.
Una última funcionalidad muy interesante es que este “espejo mágico” permitiría la comunicación del técnico de mantenimiento con el servicio de asistencia y también el acceso a manuales, instrucciones, histórico de fallos,… convirtiéndose así el propio espejo en una herramienta de trabajo para la empresa de mantenimiento.
Los inconvenientes de este nuevo producto son varios, pero no insalvables. Tanto el espacio que ocupa la pantalla (ancho de 30/35mm de uno de los modelos) como en principio el peso no afectarían a la configuración del ascensor, aunque para evitar problemas hay que ser cautos y comprobar muy bien su impacto, especialmente en el caso de que se instale en ascensores ya existentes.
Aún no siendo recomendable para ascensores susceptibles de ser objeto de vandalismo, y difícilmente certificables bajo la norma EN81-71, la utilización en otros productos como el de las puertas de refrigeradores en supermercados, demuestran la dureza que estas pantallas pueden llegar a tener.
El mayor inconveniente para una implantación mayoritaria es el coste mismo de la pantalla que puede estar cerca de un 10%-20% del coste total de un ascensor normal.
A no ser que convirtamos la pantalla en un espacio atractivo para anunciantes que genere, como hemos comentado, una fuente de ingresos, el sobrecoste puede limitar la difusión de este innovador producto a ascensores de edificios comerciales. Y si no es por la vía de aumento de ingresos, habrá que esperar a que sea la reducción de costes de las pantallas multimedia la que acabe haciendo posible que los espejos de los ascensores del futuro próximo pasen a ser “espejos mágicos”.
Estaremos atentos a la evolución de estos productos y deseamos mucho acierto a sus promotores. En sus manos está ofrecer una herramienta que puede revolucionar la experiencia de los usuarios de ascensores.
(Read in English)
Buenos días, entiendo que en breve espacio de tiempo será un opcional en ascensores nuevos (con vistas a ser estándar), con muy buena aceptación en el sector hotelero, comercial, sanitario.
En reformas de ascensores existentes, creo que será un producto de muy difícil ubicación, sobre todo, en el sector residencial.
De todas formas como con todo lo tecnológico, a lo mejor, dentro de un par de años, estamos hablando de otras cosas …..
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Efectivamente queda algo de tiempo para que se generalice, pero la tendencia a la conectividad está ahí.
Un factor de aceleración de esta tendencia es la gestión de la publicidad y quién sepa explotar esta oportunidad puede encontrar un interesante nicho de mercado.
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